Y aquí
estamos mi primogénita y yo, tarde lluviosa gris y fría, y a sus tres años no
haciendo siesta les confirmo a las que saben que si no se tiene programa una
tarde en casa puede llegar a ser muy larga, además, esta también el hecho que dejarla
toda la tarde frente a la tableta me remuerde la conciencia fuertemente porque
se que tanto youtube no es bueno.